Julián Castillo, inspirado en la grandeza de Omar Rayo crea obras que ya han sido merecedoras de un reconocimiento en los Guinness Record. No le gusta lo convencional, por eso sus murales, lo que más le llama la atención, son pintados con lápiz, crayones o sangre humana. Es tatuador y hasta tiene una barbería donde comparte obras, historias y sueños. #colombiabacana #unpaismagicopordescubrir
