Los monjes que habitan en el Monasterio Benedictino El Rosal le abrieron las puertas a Colombia Bacana para contar cómo viven, cómo le dedican la vida a Dios y cómo siguiendo las enseñanzas de San Benito, se preparan en diferentes oficios que convierten en arte. La carpintería es uno de ellos, sus creaciones, más bien, sus obras de arte, son apetecidas en iglesias de todo el país. Colombia Bacana, un país mágico por descubrir.